Sin cultura de donación
La experiencia de médicos mexicanos en transplantes data de 1963.
A diario miles de personas mueren en México debido a que nunca llegó la segunda oportunidad.
La escasa información que existe en México en torno a la donación de órganos, ocasiona que miles de personas que se encuentran a la espera de un transplante, vean alejarse la posibilidad de una mejor calidad de vida.
En el país, la cultura de la donación simplemente es letra muerta, es de los temas que a los mexicanos nos les gusta tocar, es por ello que a diario miles de personas mueran sin la oportunidad de recibir un órgano donado.
Desde hace 52 años, en México se realizan transplantes de órganos, desafortunadamente y a pesar de las experiencias adquiridas desde hace más de medio siglo, a nivel mundial se ocupa el lugar 42 en la materia.
Existen datos duros dados a conocer por el Centro Nacional de Trasplantes (CENATRA) estos arrojan que hasta 2015, existen 19 mil 700 personas en espera de un trasplante.
De la cifra arriba informada el 43 por ciento son mujeres y 57 por ciento son hombres; las edades con mayor número de personas en esperas son entre 21 y 30 años.
Ni lo mencionan
Si a nivel mundial, México ocupa el lugar 42 en Palenque el tema se ha convertido prácticamente en un tabú, debido a que son contadas las personas que quisieran convertirse en donadores.
En ese sentido Miguel Ángel Medina Hernández, coordinador de Salud Pública de la Jurisdicción Sanitaria seis, comentó que en Palenque, desafortunadamente es muy raro escuchar que una persona sea donador.
De acuerdo con el funcionario, en la región y en todos el país no se tiene esa cultura de donación; se tendría que trabajar mucho en la promoción porque desgraciadamente de los principales problemas que generan las enfermedades crónicas, degenerativas y algunos otros padecimientos que obligan a tener la necesidad de alguna donación.
Aseveró que en la región, no cuentan con ningún tipo de campaña aunque en nuestro país en general, se tienen más de 19 mil personas que están en espera de un trasplante de órganos.
Así mismo se estima que una persona ya fallida puede salvarle la vida a siete personas.
“Se necesita trabajar en esta cultura de donación aunque por todos los medios se trata de que las personas ya fallecidas regalen vida a otras personas con sus órganos”.
