Por: SHD

AGENCIA:

MÉXICO

La "Estela de Madrid" en realidad ni es una estela ni por supuesto es de Madrid aunque podemos admirarla en el Museo de América.

Esta pieza, conocida como "Estela de Madrid", la adquirió Antonio del Río durante la excavación de 1787 en la ciudad de Palenque.

Dicha excavación, realizada con el auspicio de la Corona española, fue la primera que tuvo lugar en América siguiendo un método científico de intervención y registro de la información con informes y dibujos.

Realizada en bajorrelieve sobre piedra caliza, representa a un personaje con deformación craneal, ataviado suntuosamente con anchos brazaletes, un collar, una orejera tubular con pendientes circulares y un adorno en el puente de la nariz.

Lleva una ancha cinta sujetando el cabello recogido en la nuca y un tocado de plumas. Viste una falda con flecos sujeta con un fajín a la cintura y está sentado en un trono que tiene la forma de un personaje fantástico.

Esta pieza constituye uno de los bajorrelieves esculpidos que sostenían el trono de Palenque en una de las salas del patio central del Palacio.

La talla representa uno de los cuatro bacabs, los dioses que según la mitología maya sujetan el cielo sobre la tierra, y se identifica por la red que ata su cabello.