Por: SHD

AGENCIA:

MÉXICO

Gilgamesh, el primer buceador, registrado hace más de 4.000 años, en busca de la inmortalidad.

Su inmersión en el agua en el año 2800 a. C. para obtener la "planta de la eterna juventud" está registrada en escritura cuneiforme en tablillas de arcilla.

Cuenta la leyenda que ató pesadas piedras a sus pies y las arrastró a las profundidades del mar. Estando ya sumergido encontró la planta, la recogió, cortó la piedra que tenía bajo sus pies y llevó la planta de vuelta a la tierra. Una vez que estuvo en tierra, sintió que era un buen momento para tomar una siesta y se quedó dormido. Mientras dormía, una serpiente llegó y se tragó la planta antes de que el pobre Gilgamesh pudiera volverse joven para siempre.

La madre de Gilgamesh, Ninsun ('vaca salvaje del redil'), era una diosa, prima del dios Enlil, el gobernante divino en la Tierra, y su padre, un sacerdote terrestre. Ella vino de un planeta en el espacio exterior.