Por: Agencia/VR
El Polyforum de Tuxtla Gutiérrez se llenó de energía y entusiasmo con la presencia de miles de estudiantes del Colegio de Bachilleres de Chiapas (Cobach), quienes recibieron con emoción al gobernador Eduardo Ramírez Aguilar. En un ambiente de alegría, aplausos y muchas selfies, celebraron la entrega de chips con telefonía celular e Internet móvil, como parte del Programa Conecta Chiapas, que busca fortalecer la conectividad y apoyar la economía de las familias.
Rodeado por la comunidad cobachense, Ramírez Aguilar destacó que su administración está empeñada en garantizar el derecho al acceso a Internet a todas y todos los estudiantes, especialmente en las regiones con menor cobertura, como los Altos y la Sierra, y al escuchar los gritos de “¡Gobernador, gobernador!”, respondió con palabras de motivación, animando a las y los presentes a seguir sus sueños con el corazón y la conciencia, para así construir un Chiapas más próspero e igualitario.
Luego de firmar como testigo de honor el Convenio de Colaboración entre la Secretaría del Humanismo y el Colegio de Bachilleres de Chiapas, para formalizar la implementación del Programa Conecta Chiapas, el mandatario aseguró que se trabajará para garantizar que ningún egresado del Cobach se quede sin acceso a la educación superior, destacando para ello la apertura de la Universidad Nacional Rosario Castellanos en Chiapas y el fortalecimiento de las instituciones educativas estatales.
“Este gobierno es humanista, no está pensando en las elecciones, sino en las próximas generaciones. No quiero que ningún estudiante sea rechazado y que sus padres tengan que mandarlos a universidades privadas”, expresó.
Durante el evento, resaltó la labor de las madres de familia en la formación de sus hijas e hijos, así como en el fortalecimiento del tejido social. Por ello, anunció que su administración brindará un apoyo mensual dirigido a ellas, comenzando en la capital del estado, para que puedan continuar desempeñando esta importante tarea.
El mandatario hizo un llamado a las madres y padres de familia a escuchar, comprender y brindar amor a sus hijas e hijos, fomentando espacios de confianza que permitan prevenir la violencia contra la niñez y adolescencia.