Por: AGENCIA / SHD

La vasectomía es un método anticonceptivo para hombres que consiste en un procedimiento quirúrgico en el que se realiza un corte en los conductos biológicos que transportan los espermatozoides para evitar que lleguen al semen. Esto garantiza que al eyacular los espermatozoides no puedan fecundar el óvulo.

En resumen, se trata de una operación para no tener hijos en donde el hombre es quien asume la responsabilidad.

-Operación quirúrgica en una vasectomía

 El procedimiento que se debe realizar en una operación de vasectomía es sencillo, toma alrededor de 10 minutos y es ambulatorio.

-Es un método anticonceptivo de gran eficiencia

 La vasectomía es un método que resulta muy efectivo para evitar la concepción. La naturaleza del procedimiento garantiza que no habrá que preocuparse por mantener algún cuidado en especial o regulación para prevenir la concepción.

-Es un procedimiento quirúrgico sencillo

 Como mencionamos anteriormente, es una operación ambulatoria que no toma más de 15 minutos. Se utiliza anestesia local, así que hay menos riesgos para el paciente.

-La recuperación es rápida

 

La recuperación tarda alrededor de 8 días. Los puntos se retiran rápidamente y en la mayoría de casos sin ayuda de un médico, pues se caen solos.

-La líbido y desempeño sexual no se afectan

 Se suele creer que la vasectomía puede afectar el desempeño sexual, sin embargo, no es más que un mito infundado. Está comprobado que esto no tiene ninguna incidencia en este factor.

-Método anticonceptivo permanente

 Si bien es posible revertir la vasectomía con una intervención quirúrgica llamada vaso-vasectomía, la probabilidad de devolver la fertilidad se reduce cada año, hasta que se llega a un punto donde no es posible revertir los efectos.

-La eficacia no es rápida

Una vez se realiza el procedimiento es necesario mantener otro método anticonceptivo por alrededor de 3 meses o hasta que los resultados médicos indiquen que no hay presencia de espermatozoides en el semen.

-Dolor, inflamación, molestias

Como en todo procedimiento quirúrgico, es posible sentir molestias como inflamación y dolor, pero son síntomas comunes que desaparecen con el tiempo.