Por: AGENCIA / SHD
Las mascarillas faciales son un elemento clave para mantener la piel sana y suave. Sumarlas a nuestra rutina de belleza y a la lista de “cosas que hago por mí” puede traer grandes beneficios para nuestra piel. En esta nota, te contamos todo lo que necesitas saber para elegir la mascarilla perfecta para ti.
El objetivo principal de la mascarilla facial es potenciar los tratamientos que le damos habitualmente a nuestra piel. Cada mascarilla contiene diferentes activos en muy altas dosis, generando un boost casi instantáneo de hidratación y nutrición con cada aplicación. Existen diferentes opciones de mascarillas que responden a distintos tipos de piel y necesidades específicas.
PRINCIPALES BENEFICIOS DE LAS MASCARILLAS FACIALES:
• Hidratar y humectar la piel
• Retirar el exceso de grasa
• Eliminar las impurezas
• Ayudar a reducir los signos de envejecimiento
¿Cualquiera puede usar mascarillas faciales?
Tanto hombres como mujeres de cualquier edad pueden beneficiarse enormemente del uso de las mascarillas faciales. Las mascarillas hidratantes no solo son un tratamiento de belleza, sino un complemento muy importante para cuidar la salud de nuestra piel.
Existen diferentes tipos de arcillas, aunque las más utilizadas suelen ser la arcilla roja y la blanca. Se componen de elementos minerales que eliminan naturalmente las impurezas y los excesos de grasa del rostro, haciendo su uso muy indicado para aquellas pieles grasas y con tendencia acneica.
El arroz ha sido parte de las rutinas de belleza oriental desde hace siglos. Este ingrediente natural actúa profundamente en nuestra piel y funciona como limpiador, aclarador natural y tónico contra el envejecimiento de la piel. Se recomienda especialmente para pieles manchadas o con signos de envejecimiento.
Este tipo de mascarillas son las más utilizadas tanto por su practicidad como por su capacidad de generar efectos visibles para distintos tipos de pieles en una sola aplicación.