

Por: AGENCIA / SHD
Slavisa Pesci, un informático italiano, descubrió algo inédito sobre la famosa obra de Leonardo da Vinci “La última cena”, hojeando la revista Sky, Pesci notó algo extraño en una imagen de “La última cena”, había una extraña sombra en el centro, como la de un libro fotocopiado. Así que, cortó la foto y la dobló los ejes de simetría y se dio cuenta que algunas particularidades cambiaban.
Intrigado, imprimió la reproducción más grande de la obra de Da Vinci, en dos copias, una normal y una sobre una transparencia. Y la
sorpresa llegó cuando giró la copia transparente y sobre poniéndola sobre la copia normal, ya que aparecieron nuevos elementos, “La última cena” cambiaba de cara, dando a luz inéditos personajes:
-Un templario a la izquierda de la mesa, en el lugar de San Bartolomeo.
-El cuchillo de la mano de Pedro se ve sobre un plato de carne del lado opuesto de la mesa
-Las montañas, un simple fondo de la pintura, se convierten en coronas sobre las cabezas de dos protagonistas de la cena.
-El vestido de Jesús se ve enteramente rojo, desaparece casi del todo el divino celeste y lo poco que queda de este color dibuja,
junto con el plato de la mesa, un cáliz.
-Felipe, ahora en la parte opuesta, parecería tener en brazos a un bebé.
Debido a esto se especula que la razón que el Santo Grial nunca ha sido encontrado es porque no era un Cáliz sino el recién nacido descendiente de Jesús.